¿Te has planteado alguna vez cuál es tu público ideal para tu producto o servicio? Generalmente la mayoría de las empresas no se para a definir cómo es el cliente ideal que le gustaría tener habitualmente, algo que es un error ya que la base de cualquier negocio son sus clientes.
El target o público objetivo es un grupo de personas que están interesadas y/o necesitan aquello que nosotros podemos ofrecer. Pero ¡ojo! No es lo mismo que público ideal. El primero es un grupo de personas con un perfil concreto que quieren o necesitan un producto o servicio en particular.
El cliente ideal, sin embargo, es algo más que público objetivo. Es tu cliente ideal porque tiene un problema, necesidad o deseo que tú puedes resolver y es consciente de ello. Además, tiene dinero para pagar la solución que le ofreces por resolver su problema y no protesta el precio, no regatea y no pone problemas a la hora de pagarte.
A continuación te damos las 5 claves para definir tu público ideal:
- Datos demográficos
Comenzaremos por los datos más básicos como el género, la edad, situación sentimental (casado, soltero, con hijos…) dónde vive, dónde trabaja y el nivel de educación. - Criterios socio-económicos
¿Qué nivel de ingresos tiene mi cliente? ¿Qué nivel de vida lleva? ¿Compra por placer o por necesidad? ¿Se deja llevar por las ofertas? Etc. Ten en cuenta que tendrás que adaptar el precio de tu producto o servicio y las ofertas a lo que el cliente ideal de tu producto quiera o pueda pagar. - Intereses y hábitos
Conocer los intereses de la audiencia es esencial para que tus campañas sean efectivas, principalmente por dos razones: poder delimitar más tu público ideal y escoger el medio social más afín para comunicarte con los usuarios. Puede que a tu cliente ideal le preocupe la política, las finanzas, el cambio climático o la alimentación sana. Intenta averiguarlo. Conseguirás conocerle mejor y saber qué inquietudes tiene. - Solución a sus problemas
¿Cuáles son sus problemas? ¿Qué le frustra? ¿qué le preocupa? ¿qué le gustaría conseguir? ¿Cuáles son sus sueños? Ésta es una de las preguntas más importantes ya que si conoces la respuesta, vas a iniciar un proceso empático con tu cliente ideal. La clave de esta pregunta es detectar qué preocupaciones le rondan constantemente en la cabeza a tu cliente potencial. - Crea un avatar
Una vez que hayas investigado sobre a quién te vas dirigir, ha llegado el momento de diseñar el avatar de esa persona, una especie de “ficha” de tu cliente ideal.
Este perfil debe ser un resumen de los puntos principales acerca de tu cliente ideal.